Receta de caldo de pollo Arguiñano: sabor tradicional y casero

La sopa de pollo es un clásico reconfortante que nunca pasa de moda. Muy especialmente cuando hablamos de la versión que nos propone Karlos Arguiñano, sinónimo de calidad, tradición y buen gusto. Si buscas una receta caldo de pollo Arguiñano, has llegado al lugar indicado. A continuación, te presentamos una receta fácil y deliciosa que te calentará en los días más fríos.

Elaborar este plato es volver a las raíces de la cocina casera, donde cada ingrediente aporta su esencia para conseguir un resultado lleno de sabor y textura. Sigue paso a paso esta receta y sorprende a tu familia con un caldo de pollo Arguiñano que será el protagonista de tu mesa.

Ingredientes para sopa de pollo

Para iniciar esta aventura culinaria necesitarás:

• 1,5 litros de agua
• 2 muslos de pollo
• 1 cebolla mediana
• 2 zanahorias
• 1 puerro
• 100 gr de garbanzos (previamente remojados)
• Sal al gusto
• Pimienta al gusto
• Un puñado de fideos o estrellitas
• 2 huevos cocidos

Si no dispones de garbanzos, puedes usar otra legumbre o incluso prescindir de ellos. La sopa seguirá siendo deliciosa.

Cómo preparar el caldo de pollo Arguiñano

El proceso es sencillo pero requiere de paciencia para que los sabores se concentren:

1. Llena una olla grande con el agua y ponla a fuego medio-alto.
2. Añade los muslos de pollo junto con la cebolla, zanahorias y puerro previamente pelados y troceados.
3. Incorpora los garbanzos, la sal y la pimienta.
4. Deja que el agua comience a hervir y reduce el fuego para mantener un hervor suave y constante.
5. Cocina por aproximadamente 1 hora o hasta que el pollo esté bien cocido y los garbanzos tiernos.
6. Retira el pollo y desmenúzalo para luego reintegrarlo al caldo.
7. Ajusta la sazón según sea necesario.
8. Agrega los fideos o estrellitas y cocina por unos minutos más hasta que estén al dente.

Recuerda remover la espuma que se forma en la superficie durante el proceso de cocción para obtener un caldo más claro y limpio.

El secreto de Karlos Arguiñano para una sopa más cremosa

Para esa textura única que caracteriza las sopas de Arguiñano, puedes agregar una cucharada de almendra molida o una pequeña cantidad de harina de trigo disuelta en agua fría. Este ingrediente se debe añadir cuando se incorporan los fideos, asegurándote de remover bien para evitar grumos.

Si prefieres una opción sin gluten, la almendra molida es la perfecta aliada, aportando un toque sutil de sabor y una cremosidad que hará de tu sopa algo inolvidable.

Sopa de estrellitas con pollo y huevo cocido

Para darle un giro a la receta tradicional, puedes sumarle a tu sopa de estrellitas con pollo unos huevos cocidos picados al servir. Esto no solo aportará proteínas adicionales sino también una riqueza en la textura que será muy apreciada.

Simplemente cocina dos huevos hasta que estén duros, déjalos enfriar, pélalos y córtalos en trozos pequeños. Agrégalos a los platos individuales justo antes de servir para que cada comensal disfrute de este toque especial.

Información nutricional de la sopa de pollo

Esta sopa es una fuente excelente de proteínas gracias al pollo, mientras que los garbanzos aportan fibra y carbohidratos complejos. Las verduras, por su parte, suman vitaminas y minerales esenciales para una dieta balanceada.

Es una comida ideal para deportistas o personas que realizan actividades físicas exigentes, ya que ayuda a reponer energías y contribuye a la recuperación muscular.

Consejos para mejorar la receta

• Usa pollo orgánico si es posible, el sabor es insuperable.
• Agrega especias como laurel o tomillo para darle un aroma más intenso.
• Si te sobra caldo, puedes congelarlo para utilizarlo en otra ocasión.

Por último, recuerda que la paciencia es un ingrediente más en la cocina. Un buen caldo lleva tiempo, así que no tengas prisa y deja que los sabores se desarrollen a fuego lento.

A continuación, te dejamos un video de Karlos Arguiñano para que veas cómo el mismo maestro cocina su famosa sopa de pollo.

Receta de muslos de pollo guisados al estilo Arguiñano

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¿Cuántas horas debe hervir el caldo de pollo?

Para obtener un caldo de pollo con un sabor profundo y enriquecido, lo ideal es dejarlo hervir por lo menos 1 hora a fuego lento. Esto permite que los sabores de los ingredientes se fusionen y que el pollo libere su esencia al máximo.

Recuerda que un buen caldo no debe hervir a borbotones, sino mantenerse en un hervor suave para que los ingredientes no se deshagan y el líquido se mantenga claro.

¿Cómo espesar el caldo de pollo?

Existen varias técnicas para espesar el caldo de pollo, como la utilización de harina de trigo disuelta en agua fría o la incorporación de almendra molida, como sugiere Karlos Arguiñano. También puedes reducir el caldo dejándolo cocinar a fuego lento y destapado para que parte del líquido se evapore y se concentren los sabores.

¿Qué contienen los caldos de pollo?

Un caldo de pollo contiene principalmente agua, pollo, y un surtido de verduras como zanahorias, cebolla y puerro. Estos ingredientes básicos, junto con especias y hierbas a gusto, aportan un balance ideal de sabores y nutrientes.

¿Los cuellos de pollo son buenos para el caldo?

Los cuellos de pollo son excelentes para el caldo debido a su contenido de hueso y tejido conectivo, que al cocerse a fuego lento liberan gelatina y nutrientes que enriquecen y dan cuerpo al caldo.

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Esperamos que esta receta caldo de pollo Arguiñano te haya inspirado para crear un plato lleno de sabor y tradición. ¡Buen provecho!

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